Mi tatarabuelo

La entrada de hoy va dedicada a mi tatarabuelo, Melquíades Manuel Fernando Adrada y Chozas. En realidad, yo no le conocí ni mi padre tampoco pero, la realización de esta entrada estará justificada según vayamos avanzando.

Hace unos años realizaron una entrevista a mi padre y algunos familiares para una revista mensual local en la que, en uno de sus apartados, hablan sobre gente ilustre de mi pueblo. Pues bien, una de esas personas era mi tatarabuelo. Fernando nació en 1866 en Magán y fue maestro por distintos pueblos de la provincia de Toledo hasta que definitivamente en 1902 vino a mi pueblo a vivir durante trece años. Además de maestro, fue publicista y articulista en diferentes publicaciones tanto del ámbito educativo como de información general. En 1915, se marchó a Santander y allí público su obra pedagógica más interesante: Jesusito y Roca. Método para la enseñanza racional de la lectura y escritura simultáneas. ( del cual poseo una copia entera y mostraré algunas hojas de él y que se encuentra el original en la Biblioteca Nacional de España). Con este método de lectoescritura aprendieron a leer y a escribir muchos de mis antepasados y muchas otras personas en las distintas ciudades en las que residió. Más tarde, se trasladó a Bilbao y escribió un manuscrito sobre Catecismo popular de Doctrina Cristiana, Historia Sagrada y Moral para los grados 1º,2º y 3º. Después, estuvo en Sevilla impartiendo clases y, finalmente, con el inicio de la Guerra Civil, le destinaron en Zaragoza donde fallecería en 1944.

http://www.lascumbresdemontalban.com/uploadfiles/donjulianweb.pdf (Enlace donde aparece el artículo de la revista)

Portado del Método de lectoescritura

4ª Lección del método. La letra T.

Lección 14ª.  La b y la v.

Lección 14ª. La b y la v.

Mi entrada

Hoy voy a realizar mi entrada personal sobre educación en la que comentaré mi evolución hasta llegar a la Universidad lugar en el que me encuentro. Voy a presentarme otra vez de nuevo aunque creo que ya lo hice en la primera entrada. Me llamo Ander Redondo López y nací en 1990 en La Puebla de Montalbán (Toledo). Contaré mi paso por el colegio Franciscano de la Inmaculada (concertado), IES Juan de Lucena (público) y la UCLM

PREESCOLAR O INFANTIL

De esta etapa tengo solamente algunos recuerdos e imágenes en mi memoria pero trataré de aportar lo máximo posible.

Con menos de 3 años, debido a nacer en diciembre, ingresé en el Colegio Franciscano de la Inmaculada en esta etapa de infantil o parvulitos. Como su nombre indica es un Convento con su parte de iglesia y con su parte de colegio. Tiene un patio muy grande con tres pistas cementadas y una zona de tierra que ocupa otras dos o tres pistas y, además, tiene un pabellón cubierto.

Con 3 y 4 años estuve en la misma clase con la señorita Mª Ángeles. De ella tengo buenos recuerdos como profesora y tengo de ella una imagen vestida con una bata blanca y con una voz muy característica. Recuerdo una clase  en la que estábamos sentados en mesas anaranjadas 4 o 5 niños y éramos bastantes niños en clase (creo que unos 30 o más) y con diferentes edades. Recuerdo realizar muchas actividades utilizando las manos, con pintura y mucho trabajo manual para desarrollar nuestro manejo de las manos para en unos años poder escribir y recuerdo utilizar durante estos años el punzón. También recuerdo el festival de Navidad de ese año en el que nos vestimos de “pastorcitos”.

Festival de Navidad con 4 años

Con 5 años estuve en clase con la señorita Josefina. Aquí comenzaba mi último curso en infantil. De esta etapa no recuerdo exactamente pero guiándome con la entradas de mi hermana diré que fue algo parejo. Si que recuerdo que en esta etapa de 5 años ya empezamos hacer fichas de las letras y a comenzar a escribir y a leer. Por el contrario, actualmente tengo entendido que la lectoescritura no se comienza hasta la educación primaria. Estábamos sentados en grupos de 4 en unas mesas azules y recuerdo que en Carnaval salíamos vestidos por la localidad algo típico en la población.

PRIMARIA

Empezaba una nueva etapa la educación primaria que me iba a acompañar desde los 6 hasta los doce años.

1º y 2º de Primaria. En este ciclo tuve como única profesora a la señorita Charo. Ella nos daba todas las asignaturas y creo que eran lengua, matemáticas, conocimiento del medio, religión y educación física. A diferencia con la etapa de mi hermana ya no nos dividían en educación física y costura. En clase siempre hemos sido más o menos unos 26 o 27 alumnos. De esta etapa recuerdo los famosos ábacos para aprender a contar y la mejora de la lectura y de la escritura ya que habíamos aprendido en la etapa de infantil. En esta etapa todavía teníamos la jornada partida e íbamos a clase por la mañana y por la tarde al centro. En este ciclo recuerdo que en el colegio se realizaban actividades extraescolares como el fútbol  en las que participé pero esto sólo duro durante unos pocos años más.

Ander con 6 años

3º de Primaria. Era un curso al que todos temíamos, era un cambio de ciclo. Nuestra clase se separaba de la zona de los pequeños y veíamos como nos hacíamos "mayores". Una clase con dos puertas y bastante grande que intimidaba a cualquiera y más a un niño con 8 años. Recuerdo esos primeros días como todos estábamos atemorizados por ese nuevo cambio y ese escenario que no ayudaba. Haciendo memoria las asignaturas eran las siguientes: Lengua, Matemáticas, Conocimiento del medio, Inglés, Artística, Música, Educación Física y Religión. Mi tutor era Don Carlos y por desgracia no tengo muy buen recuerdo de él como profesor ni como persona. Era un poco faltón con los alumnos y su manera de enseñar era de la antigua usanza. Sus clases de educación física era tradicionales puras y duras. Una vez a la semana hacíamos la tabla y las otras dos horas semanales nuestra educación física era recoger la basura del patio y cuando finalizábamos, los chicos podíamos jugar al fútbol y las niñas al baloncesto o a la comba. Si, es así de triste, esa fue por desgracia mi educación física hasta 6º de Primaria. Además me daba Lengua y Conocimiento del medio. Inglés, artística y música me lo daba la señorita Loli estas asignaturas nunca han sido mi fuerte pero debido a la forma tan “maravillosa” de evaluarnos  con los P.A. lo he sabido disimular porque si algo se te daba perfecto tenías P.A. con algún más y si eras regular tenías P.A. así que no te marcaban con claridad tu nota obtenida. Matemáticas me lo daba Don Antonio y recuerdo tener una gran facilidad para realizar los famosos cuadernos rubio de cuentas. De Lengua recuerdo haber realizado unas cuantas veces los cuadernos de caligrafía y, a pesar de todo, mi letra es como es y mi formal de coger el bolígrafo no es correcta. Por último, teníamos Religión con Gregorio uno de los pocos frailes del colegio que daba clase. Este sería mi profesor de Religión hasta 4ºESO.

4ºde primaria fue muy parecido a 3º ya que teníamos a los mismos profesores, mismo ciclo, misma asignaturas y misma clase.

5º  y 6º Primaria nos hacíamos mayores y de la parte de abajo del colegio nos tocaba subir a la parte de arriba con los grandes. Creo recordar que fue para estos cursos cuando se cambió de jornada partida a jornada intensiva en el colegio. Teníamos las mismas asignaturas y únicamente cambiamos de tutor. Recuerdo alguna salida fuera del aula como a Las cuevas del águila en Arenas de San Pedro y al Zoo de Madrid.



Notas de 6º de Primaria



ESO

Comenzaba una nueva etapa en nuestra educación en la que ya dejaríamos de ser niños a adolescentes. Una etapa con mayor seriedad, nuevas asignaturas y mayor dificultad en comparación con las etapas anteriores pero después de haberlo pasado nos damos cuenta que es una etapa muy fácil y con poco que hagas apruebas.

1ºy 2ºESO. Nuevas asignaturas y profesores. Estos profesores los mantendré hasta 4º de la ESO en las asignaturas

-Lengua.                                                     -Religión

-Inglés                                                        -Ciencias Naturales

 -Música                                                     -Ciencias Sociales

-Tecnología                                                -Matemáticas

-Francés                                                    -Artística

-Educación Física

 Estos dos cursos los pasé sin dificultad, aprobando todo y destacando por lo general en matemáticas y ciencias sociales. Definitivamente ya teníamos jornada intensiva y nuestras notas por fin eran entendibles. Ya podíamos sacar sobresalientes, notables, bienes, suficientes y lo menos recomendable, insuficientes. Recuerdo las excursiones al parque de atracciones que hacíamos todo los años, la excursión a las ruinas  de Carranque, a Toledo, Tembleque, Consuegra, Talavera,etc.

Ander con 13 años

3º ESO. Aparecieron la física y química y la biología y geología que sustituían a las ciencias naturales y sociales pasaba a llamarse geografía. Fue un curso en el que ya había comenzado la criba de los que queríamos seguir estudiando y los que iban a clase a pasar el rato. Ya habíamos tenido unas cuantas bajas de aquella clase que empezó en primaria.

4ºESO. En este curso nos daban las optativas ya de serie porque no éramos muchos alumnos así que había que aceptar la física y química y las matemáticas difíciles. En 4º por primera vez suspendí en la segunda evaluación una asignatura, era física o química en la cual había sacado en la primera evaluación un 9 pero fue un tropezón. Se acababa el curso, yo no quería. Buenos recuerdos de muchos profesores como los de primaria pero a los más cercanos como Don Alfonso con sus clases de matemáticas y física y química, sus buenas explicaciones, sus grandes frases y sus grandes clases de las que me gustaría volver a  tener algún día, con la señorita Tere en Lengua su forma de dar clase y su genio que la caracteriza,  con Emiliano ¡por fin sabía lo que era la educación física!, la sabiduría del padre Victorino en francés, parece que le estoy viendo leer Le petit prince y algún profesor más que me ha marcado. Por desgracia, hay muchos que si no los nombró no es porque no recuerde su nombre sino porque no se  han merecido estar en mi autobiografía de estudiante. Aprobé todo, cerré los ojos y me puse a pensar y a mirar hacia atrás… había terminado una etapa muy importante en mi vida. El último día de clase en el festival nos entregaron la orla como finalización de nuestra etapa allí. Habíamos quemado una etapa y en unos meses tendríamos que afrontar la siguiente. Mi relación con gente de mi clase es buena con los chicos y justa con las chicas. Sorprendentemente conté y unos doce o trece estamos estudiando una carrera universitaria y unos cuantos en ciclos formativos y la verdad como esta hoy la educación creo que  ha sido una  clase bastante buena en cuanto a resultados.

Foto de clase 4º E.S.O.

BACHILLERATO

Aquí comenzó el cambio. Después de toda una vida estudiando en el mismo centro tocaba cambiar al instituto. Un lugar que se encontraba a tres minutos andando de mi casa pero que no conocía por dentro.

Al echar la matrícula recuerdo que fue una difícil decisión optar por un bachillerato u otro porque tenía muchas dudas, me gustaba todo y más o menos controlaba de todo. Finalmente, me decidí por el bachillerato científico-tecnológico.

Al principio recuerdo muchos nervios y no sé si se puede decir miedo o temor a enfrentarse a una situación nueva. Ahora fríamente lo pienso y en esa clase estaban además de mis antiguos compañeros, estaban muchos de mis amigos pero la novedad era los que nos frenaba un poco a todos. La primera semana la recuerdo un poco rara porque no conocía al centro, ni a la mayoría de los profesores ni a muchos de mis compañeros pero con el tiempo me acostumbre a vivir con ello. El profesorado de forma general esta más distante de los alumnos que en el concertado. Pienso que la principal razón es que con el mismo profesor de matemáticas he estado los cuatro de eso y en el instituto vas cambiando de profesores y no te conocen como eres personalmente. Los profesores a los “nuevos” nos trataban bien e igual que al resto salvo un profesor que nos hizo un desprecio por no haber dado una cosa en la eso que ellos si que habían dado.

Mis asignaturas fueron Lengua, Filosofía, Matemáticas, Física y Química, S.C.R, Educación Física, Dibujo técnico, Inglés y Tecnología.

El primer cuatrimestre y los primeros  exámenes no fueron nada bueno y los resultados fueron bastante malos. El cambio y el proceso de adaptación me afectaron bastante. Suspendí inglés, matemáticas y física y química. En las recuperaciones conseguí aprobar ingles y física y química pero me empecé a dar cuenta de que lo que estaba estudiando lo podía aprobar pero no me gustaba lo que estaba estudiando.

En el segundo cuatrimestre las cosas fueron parecidas y suspendí solo matemáticas. Este cuatrimestre realizamos el viaje de fin de curso que fue un crucero por el Mar Mediterráneo del cual tengo muy buenos recuerdos.

Foto del crucero. Coliseo de Roma

En el último cuatrimestre, cada vez estaba más harto y me gustaba menos lo que estaba haciendo y tras aprobar toda la primera ronda de exámenes  excepto matemáticas decidí hablar sobre lo que me pasaba con mis padres y con mis hermanas. Tras hablarlo su apoyo fue inmediato y que si no me gustaba este bachillerato  que no pasa nada por repetir un año. Esta decisión no la sabía nadie hasta que se lo expuse a mi tutora Raquel, se quedó sorprendida porque sabía que yo iba bastante bien y que ese curso batió los récords de suspensos desde  que llevaba el instituto funcionando. Hablé con ella y con los jefes de estudios para intentar examinarme en septiembre del resto de asignaturas no comunes del otro bachillerato para no perder un año pero no me dejaron porque no estaba matriculado. Todos estaban un poco sorprendidos porque nunca les había pasado eso. Mis compañeros de clase no sabían nada sobre lo que yo ya había planeado. Recuerdo que fue en un examen de la optativa tecnología que hice un ejercicio y entregué el examen. El profesor, Victoriano, se quedó sorprendido, me preguntó qué que me pasaba y le expliqué la situación. Muchos profesores se preocuparon y me preguntaron miles de cosas sobre lo que iba  a hacer pero otros muchos les fue algo indiferente. Todo estaba decidido a unas semanas de acabar el curso lo dejé porque no me gustaba. Muchos amigos me apoyaban, otros no pero quien decidía era yo y yo  sabía que era lo mejor para mí. Ahora pienso, después de todo, que ese bachillerato yo me lo hubiera sacado pero no habría disfrutado  porque era algo que no me gustaba. Fue una difícil decisión que tomé de la cual ahora mismo no me arrepiento. Pero bueno lo positivo fue que conocí a mucha gente y aprendí muchas cosas que todavía recuerdo y como se dice el saber no ocupa lugar.

En cuanto a la clase que tuve he de decir que ha sido la mejor que he tenido como estudiante a pesar de haber estado en ella solamente un año.

Bachillerato de Humanidades

Al fin encontré lo que me gustaba. Si lo miras, lo piensas y es un cambio muy brusco de lo científico-tecnológico humanidades. Yo creo que los genes me tiraban hacia esta rama, mi hermana María estudió Filología Clásica y mi hermana Cristina estudió Historia y Magisterio. Esta era una clase nueva, con nuevos compañeros  y los profesores también eran nuevos excepto el de Lengua y Educación Física. Mis asignaturas fueron Lengua, Historia del mundo contemporáneo, Economía, Latín, Inglés, S.C.R., Educación Física, Comunicación Audiovisual y Filosofía.

El ambiente que había en clase no era muy bueno pero lo que estudiaba esta vez si que me gustaba. Se pasó el curso rápido, aprobé todo en junio y las notas eran bastante buenas se notaba que lo que estudiaba me gustaba y le ponía más ganas. En este curso fui el chico del notable aunque hubo algún bien, suficiente o sobresaliente.

2º Bachillerato

Era y es el curso temido por todos los estudiantes por la dichosa selectividad, P.A.U, P.A.E.G o como lo quieran llamar. Tanto miedo que nos metían pues decidí ese año ponerme muy en serio y hacer eso que no había hecho nunca: llevar las cosas al día. En realidad no sabía todavía lo que quería estudiar y, por lo general, las carreras de humanidades sus notas son bajas. Tenía una baraja de opciones clara como Magisterio, Historia, Geografía, Filología Clásica o Hispánica, Humanidades, INEF…Como no lo tenía muy claro lo mejor era estudiar y tener una buena nota. Mis asignaturas eran Lengua, Historia de España, Geografía, Latín, Filosofía, Inglés, Historia del Arte y Psicología.

 Recuerdo que empecé muy fuerte  dos exámenes y saqué ¡dos dieces! Eso que no hacía desde primaria… pues si fue en lengua y latín. Latín fue un examen fácil pero llegar a la perfección nunca es fácil y lengua fue un examen de las famosas y temidas oraciones por la gente.  Esto me dio mucha energía y motivación para lo que quedaba de cuatrimestre y de curso y pensé que ese era mi año. Recuerdo que me hice hábito de estudio y no me costaba nada ponerme a estudiar, pasar apuntes o a hacer cualquier cosa. El año fue avanzando y seguí aprobando con muy buenas notas en todas las asignaturas. A pesar de las temidas semanas de exámenes que nos hacían cada trimestre que aun recuerdo. Los jueves teníamos examen de latín e historia, los viernes de historia del arte y lengua, los lunes de geografía y psicología y los martes de filosofía e inglés. Si no lo llevabas al día es difícil aprobar y sacar nota digan lo que digan

Acabé el primer cuatrimestre con 4 sobresalientes  algo inédito en mis notas como máximo había sacado dos sobresalientes en el mismo cuatrimestre. Me di cuenta de que mi esfuerzo y trabajo estaba dando resultados.

En el segundo cuatrimestre más o menos obtuve resultados parejos subiendo y bajando en algunas asignaturas.

En el tercer cuatrimestre había que apretar veíamos ya la luz al final del túnel de este largo año pero había que darle un último apretón. Acabé el curso con tres dieces, tres nueves y dos sietes. Las mejoras notas de mi vida. Mi media final con la nota de primero fue de 8,1. Con mi nota en el bachillerato con poco que hiciese en la P.A.U, ya tendría acceso a cualquiera de las carreras que había dicho. Las dos o tres semanas de estudio que nos dejaron se hicieron muy largas porque ya teníamos el curso aprobado, teníamos que volver a estudiar muchas cosas y las ganas de acabar eran infinitas.



Orla de 2º de Bachillerato



Por fin llegaba el día esperado 15 de junio comenzaba la P.A.U. en la universidad de Talavera de la Reina y acababa el día 17.

Realice el último examen, salí por la puerta y me pregunté: ¿ya está todo? No me lo creía que todo había terminado, que iba a llegar a casa y no tendría nada que hacer. Cuando acabé dije que no era para tanto la P.A.U. pero el año que te pegas es muy duro. Mi nota de selectividad fue 7,4 y la total con el bachiller 7,82.

Salí de la universidad de hacer el examen y me di cuenta de que la etapa del instituto se había acabado y ahora había que tomar la decisión de qué quería estudiar. Buenos recuerdos sobre todo del primer año, de haber conocido a mucha gente y de algunos profesores como Victoriano en tecnología, Carmen y Gemma en inglés, Juanma en latín, Fernando en Historia y Geografía, Javi en psicología y algún que otro profesor que no nombro y otros no están porque no se lo merecen.

Me consideró afortunado al haber estudiado tanto en un lugar privado concertado y en uno público para así poder juzgar  tanto una cosa como otra, ya que, he tenido la experiencia de estar en los dos lados pero por el bien de la sociedad  y la equidad siempre apoyaré a los colegios públicos.

Bueno me tenía que decidir que quería estudiar, mire los planes de estudios de las distintas carreras que quería, en el lugar que las había, etc. Y, finalmente, viendo las opciones de las carreras que nombré más arriba mi destino era la enseñanza y la educación. Estuve pensando y tal y como esta la educación hoy en día pensé que maestro era la mejor opción. Ya que somos la base de todo  y en realidad somos los más afortunados a la hora de impartir clases ya que los niños en teoría son más controlables y más respetuosos que los adolescentes. Sobre todo era evitar la etapa de la ESO donde las hormonas están en pleno auge. Además, mi hermana lo acababa de terminar en la especialidad de Educación Física y ya pues yo estaba bastante informado sobre lo que era el magisterio. Definitivamente eche la preinscripción en magisterio de primaria en Toledo y de segunda opción en infantil en Toledo y por sí acaso puse lo mismo en Ciudad Real y Cuenca.

UNIVERSIDAD

Empezaba una nueva vida, vivir en Toledo y fuera de casa. Yo me sentía igual que los niños cuando van por primera vez al colegio en un nuevo curso. Sobre todo muy nervioso por enfrentarme a una nueva situación. Llegó a la presentación sin conocer a nadie y me encontré con dos chicas de infantil que conocía. Entramos y nos comunicaron que nos habían colocado por apellidos en las clases y como yo me apellidaba Redondo la posibilidad de ir al turno de tarde era muy alta. Todos hablábamos sobre lo mismo, fuimos a mirar la famosa lista y allí confirme que me tocaba ir por la tarde por apellidarme Redondo una cosa que veo injusta. Empezábamos el famoso plan Bolonia y ahora seremos Graduados en Educación Primaria. Empezó el curso y la verdad que las asignaturas que tuve en primero no me convencía ninguna pero creó que la semana de prácticas que tuvimos en el colegio me hizo pensar a mí y a muchos de mis compañeros. Con esto vimo que nuestro futuro nos iba a gustar. Primero acabó bien, con una fantástica experiencia nueva, vivir de forma independiente, muchos amigos, conocimientos,etc.

Ahora estamos en segundo y algunas asignaturas me parecen un poco repetición del año anterior. Estamos todos un poco esperando porque aún no sabemos que pasará en 3º con las menciones ni para que servirán en futuro. Y bueno todavía mi educación no se ha terminado porque me quedan unos años en magisterio y, posiblemente, estudié otra cosa después. Eso si mi educación seguirá presente durante toda mi vida.

Mi hermana Cristina y mi hermana María

Mi hermana, Cristina Del Pilar Redondo López nació en 1982 en La Puebla de Montalbán. La comenté sobre el trabajo que tenía que realizar y ella misma decidió escribirme su parte de vida estudiantil para así poder obtener más detalles desde primera persona. Mi hermana María, por edad, hizo prácticamente lo  mismo que mi hermana Cristina, que ha de detallado en profundidad su vida estudiantil. Solamente añadiré que en 3º de B.U.P. se fue por letras puras y que en C.O.U. cambió el francés como primer idioma, por el inglés. Hizo la carrera de Filología Clásica y, actualmente, es profesora de Latín y Griego en un instituto (interina).

Mi hermano me ha pedido que “recuerde” mi vida como estudiante, una vida que parece que nunca se acaba y para colmo de males, tengo vocación para “seguir yendo al cole” toda mi vida.

PREESCOLAR

Para empezar, diré que nunca fui a la guardería, así que mi primer recuerdo como “miniestudiante” está en preescolar, o más bien, parvulitos, que era como la mayoría le llamábamos. En ese primer recuerdo, está mi seño, la señorita Josefina, y la veo conmigo en brazos y yo pegándola patadas y llorando. De ella recuerdo la bata blanca y que muchas veces llevaba pomada en los labios porque le salían calenturas.

Con 4 años entré en el cole, y como era un colegio concertado en preescolar éramos pocos niños, porque había que pagar. Estábamos juntos los niños de 4 y los niños de 5, y seríamos un total de 40 o 45, creo yo. Las mesas que teníamos los de 4 años eran verdes, nos sentábamos de 4 en 4 y recuerdo hacer cosas con un punzón.

Con 5 años, seguía en la misma clase, con la misma seño. Recuerdo hacer fichas de letras que nos hacía ella y sobre todo recuerdo a la seño enseñarnos la letra L, haciendo con el brazo como si tuviera un lazo de rodeo americano. No puedo recordar como eran las otras letras, pero sé que de allí salíamos todos sabiendo leer y escribir, cosa que ahora para muchos no es adecuada. En este curso, también nos sentábamos de 4 en 4, pero las mesas y sillas eran de color azul, para diferenciarnos de los pequeños.

Con la seño jugábamos en el patio “a la zapatilla por detrás” y a “ratón que te pilla el gato”.

Foto vestidas de pastoras

EGB

En 1º de EGB llegaron un montón de compañeros nuevos, que venían de otros coles y guarderías (con los años supe que era porque sus padres no querían pagar el preescolar, ¡qué curioso!).

Mi seño en esos dos cursos era la señorita Margarita. En aquella época teníamos como tutora a la misma persona esos dos cursos (1º y 2º). Margarita nos daba todas las asignaturas, y que yo recuerde eran lenguaje, matemáticas, ciencias sociales, ciencias naturales, supongo que religión porque era un colegio de frailes y aquí viene lo más sorprendente, la señorita Margarita daba 2 horas de Educación Física a los niños y una hora a las niñas, la otra hora, la señorita Carmela nos daba ¡¡¡COSTURA!!! Con la costura estuve un año entero con un dobladillo que nunca aprendí a hacer.

Recuerdo que en esa clase éramos un montón, siempre cerca de los 40 y la seño podía con todos. Siempre me llamaba por mi apellido y la odiaba por eso, porque a las otras dos chicas que se llamaban como yo, siempre las llamaba por su nombre. También recuerdo que su hija venía a sonarse los mocos a la clase justo al salir al recreo porque era más pequeña y que para que nos aprendiésemos las tablas compró un montón de cuadernos para colorear y cuando te las sabías enteras podías elegir uno y quedártelo para siempre.

Al terminar 2º, venían los miedos de ir haciéndonos mayores, porque pasábamos a 3º, 4º y 5º con el mismo profesor, ¡y era un hombre! Don Alfonso sabía como darnos cuerda y a la vez sujetarnos, era un profe genial pero a la vez nos sabía regañar. Nuestro curso fue el primero que empezó a dar inglés desde 3º, y en ese curso también empezamos a tener música. En esos años en nuestro horario también se añadía senda (que era lectura), dictado, dibujo-plástica y ¡manuales! Recuerdo que en alguno de esos años se puso de moda poner en las notas P.A. y N.M, y eso nunca me gustaba, porque uno no tenía claro que nota había sacado. En los exámenes nos ponían A sobresaliente, B Notable, C Bien, y luego venían D, E y F, que eran diferentes tipos de suspenso.

En esos cursos teníamos 3 profesores Don Alfonso era el tutor que nos daba casi todo, otro que nos daba dibujo y senda, y un tercero que nos daba religión.

Una vez acabado 5º, pasaríamos a “la segunda etapa”. Estaba muy diferenciada de la 1ª porque las clases estaban en la parte de arriba y teníamos más variedad de profesores.

Las asignaturas que teníamos eran:

Lengua

Matemáticas

CC. Sociales

CC. Naturales

Dibujo

Música

Educación Física

Inglés

Variaron algunos profesores, pero en general eran los mismos Don Alfonso siguió dándome Matemáticas, Educación Física el Padre Pedro y en 7º y 8º también hizo como que nos daba Inglés (también era el director del colegio).

Sociales era mi asignatura favorita y lo siguió siendo siempre.

En mi vida en el colegio siempre participé mucho: en los fines de curso, en las fiestas de Navidad, en el periódico (salió dos veces), ordenando el laboratorio,…

Título de Graduado Escolar

Libro de Escolaridad de Ander

Libro de Escolaridad de María

B.U.P. y C.O.U.

Aunque algunas personas de mi edad se fueron a Toledo a estudiar y ya hicieron la E.S.O., la mayoría fuimos a otro pueblo porque en el mío no había instituto, y en este aún no estaba el sistema nuevo.

En 1º tenía Lengua con Lourdes, Matemáticas con Jesús Ángel que además era nuestro tutor, Historia con Carmen, Inglés, Religión (otros se iban a ética), Ciencias Naturales con María Ángeles, Educación Física, Música, Dibujo y para los que queríamos ofertaban Francés, y mi profe era María Luisa. Pasar al instituto fue un gran cambio, pero ese año se demostró que íbamos bien preparados y saqué mis mejores notas.

En 2º, por desgracia, me cambiaron Lengua por Literatura, Naturales por Física y Química e Historia por Geografía, y como se me daban peor se noto la bajada de notas. El resto de asignaturas eran las mismas salvo Música y Dibujo, que ya no teníamos, y apareció el Latín con Sergio (creo que no se añadió ninguna más).

En 3º ya íbamos eligiendo nuestro itinerario y me fui por Ciencias Mixtas, que era como se llamaba entonces. Éramos pocos con esta opción y que además tuviésemos Francés como optativa. La elección consistía en Matemáticas, Lengua y Literatura y Ciencias Naturales. En 3º tuve de profesor de Historia a Paco, el más temido de todo el instituto, pero que era genial. Nos tenía acobardados porque si él entraba antes que tú te sacaba en medio de la clase a preguntarte, si no había nadie que hubiese llegado tarde “tocaba el santo del día” (salía la persona que tuviese el número de lista, igual que el día que era), además nos hacía sacarnos unos a otros, nos hacían “sondeos de opinión” (exámenes sorpresa),… era un gran profesor. También apareció en nuestras vidas la Filosofía con Eusebio, un hombre muy optimista, y Paloma en Educación Física, a la que considero un gran ejemplo.

Ya llegó C.O.U. y como no podías elegir Ciencias Mixtas, porque decían que no había suficiente gente que lo eligiera (MENTIRA), me pasé a letras mixtas:

• Obligatorias: Lengua, Inglés y Filosofía
• Optativas: Literatura, Historia, Historia del Arte y Matemáticas

En este curso confirmé mi gusto por la Historia y por la Historia del Arte, en Historia volví a tener a Paco y en Arte al director del instituto. Como anécdota, Paco me puso una nota baja al finalizar porque los sondeos de opinión me bajaban la nota, así que me presenté a la recuperación con todos los que estaban suspensos y no me quería dejar hacer el examen, pero soy tan pesada que al final me dejó hacerlo y saqué un notable.

En este curso no estudié tanto como hubiera debido, pero al final aprobé y fui a selectividad. La selectividad fue…una mier….porque mi año se dedicaron a poner exámenes un poco complicados (lo afirmó porque el año anterior pusieron cosas que se reconocían fácilmente, muy básicas).

(En el instituto también participaba en la semana de la música, en el periódico, obras de teatro,…)

De ahí tocaba pasar a la universidad, pero mi 6.67 no me permitió entrar a Periodismo, mi carrera soñada, así que…acabé haciendo Historia en Madrid, en la Complutense.

Licenciatura de Historia (Univ. Complutense)

Historia la hice en una universidad grande, con 4 clases por curso, 2 de turno de mañana y 2 de turno de tarde. Aquí fue donde vi muy claro que hay profesores malos que dan asignaturas bonitas (mala suerte para mí), y profesores buenos que dan asignaturas feas (buena suerte para mí), conclusión que según como sea un profesor, puede hacer que algo te guste más o menos.

Esta es una bonita carrera, que creo que muchos la deberíamos hacer como segunda carrera por interés, más que para conseguir trabajar de algo relacionado con ello.

Lo más lamentable de los primeros años era la hora de la matrícula, puesto que tenías que hacer noche en la puerta de la universidad para poder coger un buen número que te permitiera elegir turno y optativas.

También añadiré que mi Uni con mi carrera, fueron pioneras en el dichoso Plan Bolonia, que nadie tenía muy claro como implantar.

Magisterio de Educación Física ( UCLM, Toledo)

Mi segunda carrera, hecha por tener más salidas laborales. Aquí me encontré al empezar un desfase generacional, ya que mis compañeros tenían 18 años cuando yo tenía 24, no parecen mucho, pero es lo justo para diferenciar a una persona más formada y madura con jovenzuelos, que por desgracia para ellos han hecho la ESO. Con esta gente me di cuenta de la formación que tenían muchos de ellos, poca cultura, desinterés por todo, muchísimas faltas de ortografía, y lo que para mí fue peor e insultante, demasiadas chuletas y excesivo peloteo a los profesores, consiguiendo con ello mejores calificaciones.

En estos años tuve grandes profesores y paso a mencionar a algunos de ellos, que en algún modo me ayudaron a seguir formándome no solo como estudiante sino también como persona: Rosique, Luis Mi, Drudis, Virgilio, Halcones y Ernesto. También diré que otros profesores no estuvieron a la altura de lo que se espera de profesores de universidad.

En mi último año de magisterio (hice 1º en un año, y al año siguiente hice 2º y 3º), tuve que realizar las prácticas en un cole, y volví a mi colegio. En ese momento y al año siguiente, por motivos personales, me di cuenta de que muchas personas que habían sido importantes en mi infancia, realmente no se merecían estar en mi memoria.

Foto de la Orla de Magisterio de Educación Física

Diré que recuerdo el nombre de todos y cada uno de mis profesores del colegio y del instituto, y los que no aparecen aquí es porque no merecen estarlo.

Después de esta parrafada añadiré que aunque sea maestra y seguiré luchando por trabajar de ello, tras conocer a mucha gente que se dedica a la docencia, cada vez tengo más en mi mente la idea de no llevar a mis hijos al colegio y educarlos yo, porque creo que hay mucha gente que no tiene ningún tipo de vocación y solo ha buscado una trabajo que les deje vivir bien y tener muchas vacaciones.